Albert Ferrer, Director ejecutivo en Ferrer&Ojeda.
He tenido la suerte de desarrollar parte de mi trayectoria profesional, durante más de 10 años, fuera de la empresa familiar, conociendo diferentes sectores, industrias y clientes, que me han permitido aprender de primera mano cómo enfocar diferentes situaciones empresariales. He tenido mucha suerte, de poder aprender de jefes extraordinarios que me han ayudado a crecer y confiado en mí en entornos exigentes.
BERKLEY ESPAÑA: – Breve presentación. Nombre, trayectoria profesional.
ALBERT FERRER: Albert Ferrer, actualmente director ejecutivo en Ferrer&Ojeda y miembro de la 4ª generación de la empresa familiar.
Soy licenciado y MBA por ESADE, donde terminé mi carrera universitaria. Después de haber vivido un año en Canadá, empecé mi carrera profesional en consultoría estratégica en una firma americana, en su oficina de Madrid y luego en París. Luego trabajando como ejecutivo para una empresa familiar multinacional española con un proyecto de crecimiento extraordinario. Estas etapas han sido una escuela fantástica.
He tenido la suerte de desarrollar parte de mi trayectoria profesional, durante más de 10 años, fuera de la empresa familiar, conociendo diferentes sectores, industrias y clientes, que me han permitido aprender de primera mano cómo enfocar diferentes situaciones empresariales. He tenido mucha suerte, de poder aprender de jefes extraordinarios que me han ayudado a crecer y confiado en mí en entornos exigentes.
A menudo, frente a determinadas situaciones de negocio que hoy planteamos en Ferrer&Ojeda, puedo recurrir a esa experiencia previa.
BERKLEY ESPAÑA: – ¿Por qué apostó por el sector seguros?
ALBERT FERRER: En 2016 surgió la posibilidad de unirme al proyecto familiar en Ferrer&Ojeda y no lo dudé. Desde pequeño he estado conectado de alguna manera con el negocio y con el sector seguros, porque en casa lo hemos vivido de una manera muy especial con mi abuelo, mi tío y mi padre. Aunque nunca me he sentido presionado por parte de ellos, quienes me han dado toda la libertad y apoyado en todo momento.
Siempre había creído que mi apuesta por incorporarme a Ferrer&Ojeda, debía pasar cuando se cumplieran dos condiciones: por una parte sentir que realmente existía la necesidad de colaborar ayudando a un proyecto empresarial, atractivo y retante. Y por la otra, cuando llegara la necesidad de empezar a plantear un relevo generacional, compartido con otros miembros de una siguiente generación. Y estos dos factores se dieron entonces.
BERKLEY ESPAÑA: -¿Qué es lo mejor que has encontrado en este sector?
ALBERT FERRER: ¡La misión del sector en la sociedad! La esencia del seguro es muy bonita y cuenta con un rol imprescindible en el desarrollo empresarial y económico de nuestras sociedades. Con una misión clave en preservar y facilitar un mejor futuro, tanto a las personas como a las empresas. Por su universalidad y transversalidad en la economía y en nuestras vidas. Y desafortunadamente, es algo que todavía goza de poco reconocimiento y en general muy desconocido en nuestra sociedad.
Y sin duda, lo que más valoro del sector, son sus personas. He encontrado a extraordinarios profesionales, en muchos casos vocacionales, algo que nunca se diría, en un sector como el nuestro, visto desde fuera. Por encima de todo me ha permitido conocer a personas muy íntegras, sensatas, expertas, con humildad y con buen hacer.
BERKLEY ESPAÑA: – ¿Cuáles consideras que son los principales factores de cambio del sector seguros en los próximos años, especialmente en el segmento de empresas?
ALBERT FERRER: Como sector nos enfrentamos a grandes retos. Que aguardan consigo buenas oportunidades.
Coyunturalmente, debemos gestionar las limitaciones en las capacidades de suscripción de los mercados aseguradores para algunos ramos y algunas actividades empresariales. En unos momentos de incertidumbre y con escenarios más volátiles y con mayor nivel de riesgo. Además, debemos acompasar la necesidad de aseguramiento de determinadas industrias con un importante salto cualitativo en mejorar la protección de nuestros activos productivos como país, lo que requiere primero la convicción de hacerlo y luego la inversión. Y esto necesita por una parte el tiempo y por otra, el compromiso.
Y estructuralmente, los principales cambios a los que nos enfrentaremos en los próximos años es en servir a un cliente más experto y exigente. A una competencia creciente en la atracción y desarrollo de talento, más abierto al mundo y menos endogámico. A adecuar nuevas soluciones a riesgos coyunturales que parece se están convirtiendo en sistémicos, como la periodicidad en fenómenos atmosféricos y climáticos extremos o los ciberriesgos. A cambios regulatorios con mayores exigencias en materia de compliance y protección de la información. Y a una necesidad de cambiar maneras de hacer, en procesos y operaciones internas, que tienen que ser necesariamente más ágiles, más rápidas y menos pesadas. Con mayor y mejor capacidad de dar respuestas.
Nosotros lo primero que tenemos claro que debemos hacer para adaptarnos a todos estos cambios, es que hay cosas que no debemos cambiar. Como son nuestra cercanía y preocupación auténtica por cada cliente. Un negocio de asesoramiento como es el nuestro, va principalmente de esto. De escuchar, de entender y luego proponer y dar respuesta a cada cliente. De manera solvente. Aunque las preocupaciones de nuestros clientes cambien con el tiempo, la dinámica del modelo de negocio es en esencia la misma y no la podemos perder. ¡Al contrario, apostamos por reforzarla! y hacerlo con tecnología, con personas y con un asesoramiento y soluciones aseguradoras de mayor calidad.
Son cambios muy bonitos que recorrer, con mirada larga, juntos como sector.
BERKLEY ESPAÑA: – ¿Qué expectativas tienes para 2023? ¿Cómo crees que será este año para nuestro sector?
ALBERT FERRER: Pienso que será un buen año en términos generales. A pesar de las colas que aún deberemos gestionar y aflorarán por el fin de las ayudas a la recuperación postpandemia. A las consecuencias del incremento de la inflación, que, aunque menos de lo esperado, tendrá su impacto. Y a la interrupción y encarecimiento en las cadenas de suministro y el efecto China.
El endurecimiento del mercado asegurador del año pasado y de estas últimas renovaciones, con encaje de primas, ayudará a que los números sean buenos, en cuanto a negocio, recuperando en muchos casos resultados técnicos, que, debido al incremento de la siniestralidad en ciertos ramos, habíamos sido incapaces de equilibrar en entornos de primas insuficientes. Si somos capaces de acompasar bien los tiempos de acuerdo con nuestros clientes, lo haremos realmente bien. A la vez que mejoraremos verdaderamente la gestión de riesgos y la protección de las empresas, que es el sentido de nuestro trabajo.
BERKLEY ESPAÑA: – ¿Qué consejo darías a las nuevas generaciones que quieran dedicarse a la mediación de seguros?
ALBERT FERRER: Que valoren mucho la experiencia. Y que valoren mucho a las generaciones que les preceden. Que aprovechen su generosidad. Que le demos más importancia al cómo hacemos las cosas, el hacerlas bien, que no únicamente al resultado. Porque a largo plazo, es la única manera de crecer y crear proyectos sostenibles, que creen valor en el tiempo. También en términos de rentabilidad.
Que nunca abandonen su espíritu crítico y su pasión por lo que hacen. Pero que lo hagan de manera constructiva. Estamos en un mundo donde lo fácil parece ser destruir y quejarse, más que construir y proponer. Y descuidar más que cuidar. Yo creo mucho en un liderazgo por valores, que además es el que respiramos cada día en Ferrer&Ojeda, donde nuestro mayor reto es construir un nuevo futuro ilusionante y de crecimiento, sobre nuestro legado, en un mundo cada vez más incierto y complejo a nivel global con una componente genuinamente muy humana, que para nada tiene que ir en detrimento de la excelencia en nuestro nivel de servicio, en nuestros resultados y en nuestras soluciones al cliente. Sino bien al contrario, lo debe potenciar.
BERKLEY ESPAÑA: – 2 pinceladas de cómo eres fuera del ámbito laboral. Hobbies, gustos, etc.
ALBERT FERRER: Casado con Marta, desde hace más de diez años a quién conocí en la universidad y es todavía mi mejor amiga. Ejemplo de mujer en mayúsculas. ¡Además me aguanta! Somos padres de dos hijas fantásticas, María (6 años) y Andrea (4) responsables y disfrutonas a partes iguales. Juntos disfrutamos de nuestra Barcelona, viajamos menos de lo que nos gustaría (malditas agendas), y descansamos eso sí, cada verano en Ibiza, desde hace 40 años con los abuelos y familia. El norte de Ibiza es nuestro lugar en el mundo.
¡Soy un apasionado de los deportes! me apasionan todos y entre ellos el futbol, nadar y el ciclismo, que va de pedalear y pedalear. Y muchas veces pedalear hacia arriba como en la vida ¡Las mejores etapas son las de alta montaña! Donde primero, cada uno tiene que ponerse en forma, luego encontrar su cadencia y finalmente tener la ilusión por continuar pedaleando, aun el cansancio, aun las dificultades. Eso es, dar una pedalada y luego otra. Y luego otra. Y luego otra… No hay mayor secreto. Aceptando que unos días estarás mejor y otros (la competencia) lo hará mejor que tú. Y aceptarlo con deportividad. Así es el deporte.
Siempre he pensado que, siendo fiel a uno mismo, a unos valores y a una manera de hacer, que en Ferrer&Ojeda son extraordinarios (creedme) y luego con mucha dedicación y pasión por lo que haces, acompañado con un gran equipo, la vida y mi trabajo son un camino que vale mucho la pena recorrer.